lunes, 26 de mayo de 2014

1917 - 2017

      




          La Santísima. Virgen, nos revela el resto del Tercer Secreto de Fátima, el que tenga oídos… Esto es parte de los últimos mensajes a la humanidad, por parte del Cielo. En Medjugore. A tres videntes les falta que les sea revelado el último de los Tres secretos.   Dentro de poco, ya no habrá más mensajes, como se le dijo a Santa María Faustina Kowaska, se está terminado la “Hora de la Misericordia”


   Tercera Parte del Secreto de Fátima

      La Paz de Dios sea con mis queridos hijos. Les digo que Soy  la Siempre Virgen Santa María, REINA Y SEÑORA DE TODO LO CREADO. Les digo que, lejos de ser invención humana, Mi venida es una prueba de la Misericordia y el Amor de Dios.
 Queridos hijos, el mundo que por su voluntad ha buscado siempre la senda torcida, olvidando a su Creador y sus leyes, tiene que hacer un gran cambio si no se quiere ver juzgado ante el Trono del Altísimo de manera muy severa. Estando consientes de Mi Maternidad de los hombres por el legado de Mi Hijo Crucificado, he venido en varias ocasiones a invitarles al cambio, a la conversión, a mudar de vida. Como lo hice en 1917 en Fátima, en donde con un secreto en tres partes, hice un llamamiento al mundo que comenzaba pecar de sobremanera. Muchas de Mis Profecías de La Cova se han cumplido ya algunas, y otras están por venir. La Iglesia ha revelado dos partes y la tercera a medias. Si lo hubieran hecho completamente y antes, mucha y más grande cantidad de almas serían las que se hubieran salvado. Ahora es este tiempo, en el que la parte tercera de dicho secreto se cumple, la Iglesia ha revelado como tercera parte de Mi secreto el asesinato de un Papa, el cual corresponde a la debilitada figura de Juan Pablo II. Pero ese no es todo mi secreto. Y queriendo Yo, la Madre de Dios, que los hombres se salven y lleguen al conocimiento, como última carta, les revelo hoy la Tercera Parte. 
Es mi mensaje, y si la Santa Madre Iglesia no ha querido acatar Mis palabras, dejando, por negligencia que muchas almas sean lanzadas al infierno por no revelar enteramente Mi Profecía, con la que conociéndola gran parte del mundo se hubiere convertido, Rusia no Me ha sido consagrada como era Mi deseo, y por esto su conversión no llega. Les digo que satanás se ha introducido en lo mas hondo de la Iglesia. La falsa doctrina ha entrado, los sacerdotes aprenden y dicen blasfemias. 
Los religiosos y religiosas han comenzado a quitarse sus hábitos. Las mujeres se visten como hombres y estas modas sacrílegas irán en aumento, Esto lo advertí en Fátima y se ha cumplido. 
Pero he aquí la Tercera Parte: El Papa Juan Pablo II, después de uno de sus viajes apostólicos, muy cercano, será quitado de su Trono (estén atentos el 14 de Agosto del 2004, el Papa viaja a Francia), tomando la Santa sede de Roma un falso pontífice que prepara la venida del falso Cristo (el anticristo “Maitreya”). El que teniendo el poder de Satanás engañara al mundo con falsos milagros, traerá una falsa paz entre los pueblos, principalmente entre los que ahora están en guerra. Los judíos le aclamaran como el Mesías esperado, ellos no han encontrado la luz por haber pedido que la sangre del Justo cayera sobre ellos, por todas las generaciones. Los buenos serán martirizados. El Santo Padre sufrirá mucho, y las naciones que se vuelvan al falso Cristo serán aniquiladas. La Santa Eucaristía será quitada. Los dogmas de fe serán puestos como mentira. La Iglesia y el mundo entraran en la oscuridad. El Santo Padre tendrá que huir y finalmente será asesinado entre los sacerdotes, religiosos y religiosas que aun perduren en la fe verdadera. Pero antes de todo esto vendrá un aviso (El Gran Aviso), que todos han de sentir y experimentar. Sera como un pequeño juicio para purificar sus interiores y ante una gran señal que Dios envía al mundo, para hacerles ver Su existencia Divina. En el aviso preparatorio cada persona ha de ver su alma conforme Dios la ve; algunos se convertirán pero otros todavía no. 
 Roma se convertirá en ciudad de abominación. El satanismo levantara su bandera sobre la cúpula de Pedro. Y sobre aquellos que sigan el mal vendrá un castigo. Todo aquel que en este momento este en pecado grave puede ser fácilmente engañado.  Dios hará descender fuego desde el Cielo, destruirá monumentos, edificios, centros de perdición y pecadores empedernidos, el, mundo entrara en pánico. Los pastores que no hayan sido fieles a su vocación y por el contrario hayan, con sus acciones, expuesto sus almas a la condenación y a otros consigo, prefirieran morir antes que entregar cuenta. Muchos equivocadamente seguirán el ejemplo de Judas. Brasil por los cultos satánicos y por la inmoralidad de sus habitantes, será aniquilada; esta es una poderosa razón por la cual Mi Mensaje de La Cova Da Ira fue dicho en portugués. 
 Cuando todo esto llegue, lo que ahora no creen, creerán, pero ya será muy tarde. Estoy revelando ya Mi Secreto, porque Mi Iglesia no lo va hacer, y el tiempo agoniza, Yo amando tanto a Mis hijos de la tierra, deseo su salvación. Pero la Iglesia no perecerá. Dios permitirá el mal para probar la fidelidad de Su Iglesia y mostrar su poder.
 Y al fin, los que haya permaneciendo en la fe verdadera tendrán paz y entonces serán felices, porque entonces verán que Mi Inmaculado Corazón triunfara. El mundo recordando Mis palabras, se volverá al Corazón de Mi Hijo a través de Mi. Dios será reconocido como rey y Su Voluntad será acatada por todos, implantándose así la paz y el reinado de MI INMACULADO CORAZÓN COMO REINA Y SEÑORA DE TODO LO CREADO. Pero ahora deben volverse a Dios, dejen el pecado y toda moda que ofenda al Altísimo. 
 Los consagrados deben de vivir una vida Santa, porque mucho ofende a Dios el pecado de los consagrados, deben vivir una vida santa.
 En fin, mis queridos hijos, no pueden decir ahora que no habían sido advertidos. Si no atienden a mis Maternales palabras, vendrán a cumplirse cada una de ellas con gran lamentación. No sean soberbios en su ignorancia y sean inteligentemente humildes para creer. Lo único que desea Mi Corazón de Madre es vuestra salvación y felicidad. En ustedes queda. Ninguno de ustedes ha sufrido más que Yo, porque lo que, siendo niños de mantilla y pecho, no pueden cuestionar las palabras de la Madre. Madre de Dios y de los Hombres, Madre de la Clemencia y de la Eterna sabiduría. Les amo y no deseo su perdición. Hagan la voluntad de mi Hijo, y no teniendo así nada que temer, serán felices. Bendigo todo lo que han traído y también a ustedes. Gracias por su respuesta a Mi llamada. Les amo y estoy siempre con ustedes. Mi hijo les lleve en Su Paz. Alabado sea Jesucristo.                                   
                                                                                

                            San Isidro de Grecia, 22 de junio del año 2002.